Muchas veces confundimos deseos con derechos, sin tener en cuenta lo que comporta transformar los primeros en los segundos, así como los deberes que conlleva su desarrollo.
Nuestra sociedad se debe basar en el equilibrio y compromiso entre estos tres principios.
Los Deseos son la expresión individual o colectiva de alcanzar algo, que puede ser material, emocional o de progreso. Ese Deseo, que no se imponga sobre los Derechos ni los Deberes, dentro de lo que llamaríamos el espacio de libertad y convivencia y, por tanto, puede llevarse a cabo. Antes de dar un paso para la ejecución de un Deseo, deberíamos preguntarnos si ese paso pisa a otra persona, le limita o impide ejercer sus Derechos.
Los Derechos son el conjunto de actividades y actuaciones que protegen y permiten llevar a cabo los Deseos que, a través de las Leyes y Reglas que nos damos, defienden que, como sociedad, podamos convivir con libertad y con el respeto entre diferentes criterios y pareceres. Las Reglas que nos demos han de contemplar también los cauces para proponer y debatir la conversión de un Deseo en un Derecho, con sus respectivos Deberes.
Los Deberes son aquellos que nos imponemos, a través del consenso y acuerdo, para poder defender y proteger los Derechos que nos permiten la convivencia. No suele gustar pagar impuestos, por ejemplo, pero sin ese Deber difícilmente se podrían garantizar Derechos como la Educación, Sanidad, Justicia, Defensa, Representación política, de Expresión, etc., lo que favorecería las Autocracias y Dictaduras, impidiendo o limitando Derechos y Deseos.
El equilibrio adecuado entre los tres nos define como sociedad avanzada, representada por unas reglas Democráticas que buscan satisfacer y proteger a toda la Sociedad.
Una Autocracia, “Régimen político en el que una sola persona gobierna sin someterse a ningún tipo de limitación y con la facultad de promulgar y modificar leyes a su voluntad”, es la máxima expresión de imponer un Deseo sobre los Derechos, alterando los Deberes, no consensuados por la Sociedad a la que representan los Derechos. Es la imposición, por la propia voluntad, con ayuda de intereses que representan a una minoría de la sociedad a la que dice representar y proteger. Se trata entonces de Dictadura. Limita los Derechos, impone Deberes y no permite siquiera expresar sus Deseos.
Hay Derechos que se consideran inalienables, que no pueden ser privados bajo ningún concepto. Son los presentes la Declaración Universal de las Naciones Unidas en 1948. (Aquí enlace: https://www.un.org/es/about-us/universal-declaration-of-human-rights ).
La limitación de estos Derechos Humanos fundamentales por reglas que, aun siendo amparadas por el Deseo expresado de mayorías representativas en las sociedades (Naciones o cualquier otra forma de Sociedad), hacen que esa Sociedad sea considerada con gobierno en forma de Dictadura. Recordemos la dictadura social alemana que llevó a la segunda guerra mundial, causando ingentes daños a muchos ciudadanos, imponiendo ideologías contrarias a buena parte de los Derechos Humanos fundamentales, que tuvieron que ser definidos precisamente a raíz de esa situación.
Aún con sus imperfecciones, existen tribunales de Derechos Humanos a los cuales se pueden recurrir presuntas violaciones de estos. Además de aquellos nacionales que deberían defender a las personas que consideran no respetados sus Derechos.
Las reglas de cada Sociedad han de ser respetuosas y ser guiadas por estos principios. Especialmente las Constituciones o documentos equivalentes de cada Nación, que han de recoger y definir el marco máximo de convivencia y libertad, dentro del cual se deben guiar los legisladores al desarrollar nuevas leyes.
En la definición de nuevas leyes o su modificación, se intenta defender o desarrollar Deseos en la consecución del bien común, convirtiéndose así en Derechos una vez aprobadas por las mayorías suficientes definidas en las reglas.
El Liberalismo (Definición: https://es.wikipedia.org/wiki/Liberalismo “es una doctrina política, social y económica. En lo social defiende la libertad individual, la igualdad ante la ley y la limitación de los poderes del Estado. En lo económico propugna la iniciativa privada y el libre mercado. Como actitud vital propone la tolerancia”), basado en la Ilustración defiende al individuo y, en su vertiente económica, defiende la libertad de empresa y limita la intervención del Estado en aras del libre mercado y progreso.
Popularmente se define por el principio de que “todo se puede hacer si no está expresamente prohibido”, y por tanto “menos Estado y reglas quiere decir más Libertad”. La misma lectura se puede hacer también en su posición con respecto a los Impuestos. “menos impuestos es más Libertad”.
Es el modelo adoptado en general por los partidos de derecha y centroderecha. Aunque también, en los partidos surgidos con el 15M, en algunos temas sociales. Curiosamente ambos defienden la libertad en la prostitución y vientres de alquiler, tensando los Derechos Fundamentales que deben protegerse (se trataría de imponer Deseos sobre Derechos prioritarios).
El uso de los medios de comunicación por parte de autócratas, poderes económicos o políticos, para, abusando de la presunta “Libertad de Expresión” con utilización de falsedades o mentiras directamente, sean usados para modificar los Derechos y Deberes Sociales que nos hemos dado, son otra fuente de conflictos entre los tres principios de Deseos, Derechos y Deberes.
Con la llegada de nuevos escenarios, como por ejemplo el cambio climático, crisis económicas, etc, se deberían revisar y adecuar los Derechos y Deberes, del conjunto de la Sociedad, para evitar situaciones de privilegio en aras del bien común, y ayudar a mitigar los efectos indeseados de las mismas, especialmente a las personas y colectivos más impactados por ellas.
Como Sociedad, cada persona y organización, estamos llamados a cuidar el equilibrio necesario entre Deseos, Derechos y Deberes, para defender el Estado de Derecho que garantice nuestra supervivencia como colectivo humano.

Antonio Puparelli
Informàtic i activista social
@apuparelli
